Crema delicada de cebolla

A ver, ¿qué hace uno cuando se le acumulan un montón de cebollas en la nevera y no quiere que se estropeen?
Bueno, pues inventarse algo para usarlas... ahí va una receta supersencilla para hacer una crema de cebolla deliciosa y muy ligera.
Los ingredientes:
- cebollas (dos de las grandecillas por persona, más o menos)
- patatas (una pequeñita por persona)
- caldo (de carne o de verduras)
- aceite de oliva
- sal
Cómo se prepara:
Se cortan las cebollas en trozos grandes y se sofríen directamente en la olla, con un poco de aceite de oliva.
El secreto está en dejar el fuego medio alto, para que se sofrían rápidamente y se chamusquen un poquito, sin que se lleguen a quemar. Eso le da un sabor especial a la sopa.
Mientras se sofríen las cebollas, se pelan, se lavan y se cortan las patatas en trozos pequeñitos (eso es para que tarden menos en hacerse) y se añaden a la cebolla, junto con una pizca de sal.
Se rehoga todo unos 5-7 minutos y se cubre con el caldo.
En mi caso, tenía caldo de verduras con una añadidura especial: hierbas aromáticas. Llevaba romero, salvia y tomillo. De todos modos, cualquier caldo puede ir bien, siempre que no sea caldo de pastilla, ¡mejor evitarlo!
Se tapa la olla y se deja hervir a fuego medio durante 20-25 minutos.
Cuando la cebolla y la patata están hechas, se pasa todo con un pasaverduras y ¡listo!
Esta crema se puede servir sola o con un poquito de parmesano rallado por encima.
La consistencia es muy ligera y el sabor suave y delicado.
¡Buen provecho!